Poema Lenore de Edgar Allan Poe

Poema Lenore de Edgar Allan Poe – La esperanza en lugar de la tristeza

Lenore de Edgar Allan Poe

Lenore de Edgar Allan Poe es uno de los poemas más reconocidos del autor, publicado en el año 1843 (si bien existió una publicación anterior, alrededor de 1830, en esta última versión se realizan correcciones al poema que lo acercan a la perfección). Relata en versos la historia de una pérdida, de su amada Lenore, y con hermosas palabras, una despedida.

Es de destacar que en este poema se trata un tópico casi obsesivo de Poe, la muerte de una hermosa y joven mujer, pero en lugar de manifestar pena, tristeza, su amado cree que, a donde ella ha ido, podrá verla en la eternidad, por lo que no debe derramar lágrimas.

Lenore de Edgar Allan Poe

¡Oh! ¡La copa de oro está rota! Desapareció su esencia
¡Se fue; se fue! ¡Se fue; se fue!
Suenen, suenen campanas, con ecos plañideros,
Que un alma inmaculada flota sobre el río Estigio.

Y tú, Guy de Vere, ¿qué hiciste de tus lágrimas?
¡Ah, déjalas correr!
Mira, el angosto féretro que encierra a tu Lenore;
Oye los cantos fúnebres que entona el fraile. ¿Por qué murió joven?

Ven a su lado, ven.
Que el cántico mortuorio sea dicho
Fue digna de regir;
Un cántico fúnebre a la que yace inerte,
¿Por qué murió tan joven?

Malditos  los que amabais en ella solamente
las formas de mujer,
Pues su altivez nativa os imponía tanto,
Dejasteis que muriera, cuando el fatal quebranto
Posó sobre su sien.

¿Quién abre los rituales? ¿Quién va a cantar el Réquiem?
Quiero saberlo, ¿quién?
¿Vosotros miserables de lengua ponzoñosa
Y ojos de basilisco? ¡Mataron a la hermosa,
Que tan hermosa fue!

¡Lectura recomendada!  Poema 6 - El jardinero de Rabindranath Tagore

¿Precavimos cantasteis? Cantasteis en mala hora
El Sabbath entonad;
Que su solemne acento suba al excelso trono
Como un sollozo amargo que no suscite encono
En la que duerme en paz.

Ella, la hermosa, la gentil Lenore,
Emprendió el vuelo en su primera aurora;
Ella, tu novia, en soledad profunda
¡Huérfano te dejó!

Ella, la gracia misma ora reposa
En rígida quietud; en sus cabellos
Hay vida aún; más en sus ojos bellos
¡No hay vida, no, no, no!

¡Atrás! Mi corazón late de prisa
Y en alegre compás. ¡Atrás! No quiero
cantos mortuorios,
Porque es inútil ya.

Tenderé el vuelo y al celeste espacio
me lanzaré en su noble compañía.
¡Voy contigo, alma mía, sí, alma mía!
¡Y un pean te cantaré!

¡Silencio las campanas! Sus ecos plañideros
Acaso lo hagan mal.
No turben con sus voces la beatitud de un alma
Que vaga sobre el mundo con misteriosa calma
y en plena libertad.

Respeto para el alma que los terrenos lazos
Triunfante desató;
Que ahora luminosa flotando en el abismo
Ve amigos y contrarios; que del infierno mismo
al cielo se lanzó.

Si el vaso se hizo trizas, su eterna esencia libre
¡Se va, se va!
¡callad, callad campanas de acentos plañideros,
que su alma inmaculada del cielo en los linderos
Tocando está!

El poema Lenore de Edgar Allan Poe es una obra magnífica y se encuentra entre sus trabajos poéticos más aclamados, quizás junto con El Cuervo. Su pluma virtuosa podía apreciarse desde mucho tiempo antes, incluso desde que, a sus 18 años, publicara Tamerlane y otros poemas.

¡Lectura recomendada!  El romancero gitano de Federico García Lorca

Es sabido que Lenore recibió numerosas modificaciones desde sus comienzos para publicarse con ese nombre en 1843, y, una versión revisada en 1845 por la que Poe recibió unos pocos dólares a cambio. Si se encuentran interesados en conocer con mayor profundidad el trabajo de este genial escritor los invito a visitar las notas relacionadas, y dejo a continuación algunas obras que podrían sumar a su biblioteca personal.

Si te ha gustado la nota por favor valora la misma para los demás lectores:

1 Star2 Stars3 Stars4 Stars5 Stars (9 votes, average: 4,89 out of 5)

Cargando...

7 comentarios en “Poema Lenore de Edgar Allan Poe

  1. Pingback: Edgar Allan Poe - Biografía - La Pluma y el LibroLa Pluma y el Libro

  2. Poe era un grande y sin dudas sus poemas y cuentos trascienden su historia y su momento histórico tmb un geniooooooo

  3. carlos javier gonzalez mejia en dijo:

    grandioso poema….muy inspirador te mando uno ..LA VISITA I
    Cuando la nieve del tiempo,
    en nuestras cabezas aparece, y el sordo dolor en nuestras entrañas..Advierte!..la llegada de la visita esperada!…
    quien ,con impavida mirada, ..nos señala con su sarmentoso dedo..el final de la jornada!
    Acabar asi, como un suspiro..
    sin merecer nada..
    sin recordar nada..
    sin desear nada..
    sin esperar nada!
    Solo ante su tetrica majestad..
    bajando la cabeza..
    con ojos anegados..
    rindiendo tributo . a la Esperada!
    a llegado La Muerte..
    y solo somos nada.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *