Qué son los sinlogismos de Sofocleto – El humor Literario
Para responder a la pregunta de qué son los sinlogismos de Sofocleto debemos referirnos a Luis Felipe Angell de Lama, también conocido como Sofocleto, que fue un escritor nacido en Perú en el año 1926 y fallecido en el año 2004. Se destacó por su trabajo en poesía, escritura, periodismo y humor y creó una serie de textos muy ingeniosos a los que llamó sinlogismos que son frases cargadas de humor e ironía donde la lógica de sus palabras se confronta y abre una nueva realidad.
Más allá de sus numerosas obras el autor será recordado también por la invención de estas curiosas frases a las que llamó «sinlogismos».
Para descubrir qué son los sinlogismos de Sofocleto veremos algunos ejemplos:
-Los presos políticos son el símbolo de la libertad.
-Para los verdugos, el trabajo es la muerte.
-Los avaros se mueren sin dar el último suspiro.
-Nunca subo a una balanza porque sé que me va a pesar.
-El piropo es un equilibrio entre la oferta y la demanda.
-Lo peor del farsante es que es auténtico.
-El Decreto es un capricho oficial.
-La bofetada es un aplauso unilateral.
-¿Cómo harán para vivir los muertos de hambre?
-El embarazo es la concepción que confirma la regla.
-Para graduarse de otorrinolaringólogo, lo principal es aprenderse la palabra.
-Sólo dan explicaciones los que no tienen razón.
-La advertencia consiste en amenazar por las buenas.
-Los escultores siguen viviendo en la Edad de Piedra.
-Las cartas de amor son electrocardiogramas de la ausencia.
-Las ventajas del nudismo saltan a la vista.
-Las canas ya no se respetan, se tiñen.
-Lo malo de la experiencia es que nos enseña a golpes.
-Sólo conozco un verbo reflexivo: pensar.
-Absurdo: lógica ajena.
-Lo bueno del Juicio Final es que será sin abogados.
-Amigo: sucursal de uno mismo.
-Barbarie: época en que los hombres sólo se mataban de a uno en uno.
Si conocen otros que puedan sumar o dejar datos curiosos de este genial escritor pueden agregarlos.
Me recuerdan mucho las greguerías de Ramón Gómez de la Serna
Al mal paso hay que darle prisa.
Muy bueno Patricia, muchas gracias
Recominedo leer Ambrose Bierce «El Lexicógrafo del diablo»
No todo lo que es oro, brilla!